Romero, según la acusación, habría lavado dinero en pagos de préstamos, depósitos a cuentas bancarias y retiros y adquisición de bienes a nombre de su esposa e hija.
De forma individual, al exdiputado Mata Bennett se le demanda la suma de $13,270. Mientras tanto, a sus hijos Guillermo Eduardo Mata Mayorga se le demandan $251,685.80, y a Jorge Alberto Mata Mayorga, la cantidad de $6,357.85.
De manera individual, al exsecretario privado se le reclaman $3,541.407.87 por 44 irregularidades en depósitos en efectivo y cheques en cuentas de ahorro, pagos de préstamos y de tarjetas de crédito.
La FGR detalló que la cámara dio por válidas las pruebas que demostraron que el exfuncionario utilizó fondos públicos de forma irregular en los siguientes rubros: depósitos bancarios, adquisición de vehículos y pagos de tarjetas de crédito.
La FGR asegura que la exdiputada del FMLN no pudo justificar siete irregularidades patrimoniales detectadas durante los dos últimos períodos legislativos en que ella fungió como legisladora (2012-2015 y 2015-2018), por lo que está obligada a reintegrar al erario $133,746.60.
La FGR asegura que los Saca "no han cumplido voluntariamente" la sentencia de enriquecimiento ilícito dictada el 26 de enero de 2021 por la Cámara Primera de lo Civil de San Salvador.
Las magistradas de la cámara también resolvieron que se mantienen vigentes las medidas cautelares de inmovilización de bienes inmuebles, vehículos y cuentas de ahorro a nombre de los condenados, con el fin de recuperar el dinero al Estado.
La FGR aseguró que tanto el expresidente como su hijo no han reintegrado al Estado $419,145.09 luego de haber recibido una condena en un juicio por enriquecimiento ilícito que llevó a cabo la Cámara Segunda de lo Civil de San Salvador.